
Maurilio Hernández, presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), ofreció que la designación del nuevo titular del órgano Superior de Fiscalización del Estado de México (OSFEM) no se realizará con base en cuotas de partido, sino conforme a los requisitos establecidos por la ley, el perfil de los candidatos y su experiencia en materia de auditorías.
Al ser cuestionado sobre nombres que ya se barajan, como el de José Castillo Ambriz, ex presidente del Tribunal Superior de Justicia en el Estado de México, quien en mayo de 2018 se adhirió al equipo de relaciones públicas de Morena, Hernández González rechazó que las simpatías de partido sean las que definirán la selección.
“No, no, no. La convocatoria va a ser pública, amplia, abierta. (Del reparto de cuotas) se blinda cumpliendo estrictamente con lo que marca la ley”, aseguró.
Los candidatos, expuso, deberán reunir todos los requisitos previstos en la norma, cubrir el perfil profesional (ser abogado, contador público, licenciado en administración), y tener experiencia en materia de controles, auditorías, supervisión y seguimiento de las finanzas públicas.
La Comisión de Vigilancia del OSFEM, indicó, tendrá a su cargo el proceso de selección, emitirá la convocatoria, establecerá los términos y entrevistará a todos los aspirantes.
Por lo pronto, dijo que este lunes se presentará a los integrantes de la Jucopo la renuncia de Fernando Baz para determinar la ruta e informar de la dimisión, de manera formal, a la Comisión de Vigilancia del OSFEM para que sesione e inicie el proceso de designación.
El además coordinador del grupo parlamentario de Morena precisó que la licencia definitiva aplica a partir del 15 de agosto, de tal manera que estos días se aprovecharán en la preparación del proceso de entrega-recepción, y sólo hasta que éste se concrete correrán los tiempos formales de sustitución, lo que podría implicar entre 20 y 25 días, de tal manera que en septiembre, de ser posible a principios, se formalice el nuevo nombramiento.
“Va a haber una convocatoria, el perfil y requisitos que deben cumplir ya están marcados en la ley, quien considera que cumple se puede registrar. La Comisión podría convocar a partir del 15 que es jueves, que tengamos la entrega-recepción como hecho consumado; no puede convocar antes”, especificó.
El morenista rechazó que la investigación sobre la evolución patrimonial de Baz Ferreira deba detenerse por su renuncia, pues la Contraloría parlamentaria está obligada a atender cualquier solicitud ciudadana; en todo caso, dijo, ya no opera la medida cautelar de suspensión del cargo, pues de cualquier manera ya dimitió.
Además, aclaró, aún cabe la posibilidad de que se finquen responsabilidades, si se detectaran anomalías en la entrega-recepción, mientras que el periodo para realizar observaciones en este sentido será de 180 días naturales, conforme a lo establecido por la norma.
“No se exime de ninguna responsabilidad, si es que la hubiera, no obstante que ya haya renunciado. Pero eso será resultado de la revisión de la entrega-recepción”, precisó.
El morenista negó que se haya presionado la renuncia de Baz Ferreira, a partir del amago de indagar sobre su situación patrimonial y la de su familia. “No sé si haya renunciado por miedo (la solicitud de renuncia), ya lo habíamos planteado con anticipación. El hecho de que ya lo haya decidido ayuda para que el proceso de nombramiento del nuevo auditor se haga con rapidez y nos ahorramos incluso un proceso jurídico”, dijo.
Agregó que el proceso de reestructuración del OSFEM correrá a cargo del nuevo auditor, quien estará obligado a revisar los perfiles del personal, incluidos directores y auditores, mientras la Legislatura revisa de cerca para garantizar que se cumpla con lo que marca la ley y se garanticen los perfiles; si se revisa el catálogo de auditoras externas, comentó, también será decisión del nuevo titular del OSFEM.